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"LA FIBRA... QUE CUANDO TE TOCAN LA FIBRA OLVIDAS LA HUMILDAD Y LO OLVIDAS TODO".
Apasionada en todo lo que hace, autodidacta y polivalente, Alba G. Serra, encargada de ilustrar el capítulo 5, nos cuenta en esta entrevista porqué se involucró en este proyecto, a qué se dedica y cuáles son los sectores en los que quiere profundizar su formación.
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PROFESIÓN
Tengo varias tarjetas en el cajón. En las más antiguas dice que fui administrativa-contable, las siguientes cuentan mi incursión en el diseño gráfico en una empresa web y, en las de hoy, se puede leer que me dedico a algo bastante alejado de la ilustración: trabajo como delineante en una empresa del sector químico.
Lo cierto es que soy muy autodidacta y eso me hace tener la mirada puesta en mil sitios a la vez. Pero sí que hay dos áreas en las que quiero profundizar próximamente: diseño gráfico e idiomas.
Me encanta que me hagas esa pregunta... ¡Fatal! Se me da fatal y lo que es peor, no lo soporto.
Sin duda. Me interesan sobremanera las nuevas tecnologías. No son pocas las ocasiones en que he agradecido haber invertido un buen puñado de horas en algún curso de tal o cual cosa (aunque, a priori, no tuviera que ver directamente con mi trabajo). Finalmente, nada cae en saco roto. Además, en cierta manera, todo está en casa. Como se suele decir: todo a un click. Eso sí, hay que dedicarle un tiempo del que no siempre se dispone.
ILUSTRACIÓN
Espera, que tomo aire... ¡Ya! Mi especialidad es hacer lo que buenamente pueda. Hablando claro: no me considero ilustradora y dudo que nadie lo haga. Soy una intrusa entre auténticos cracks, aunque tengo motivos (emotivos) que me animaron a vencer el miedo de lanzarme sin red a este precipicio. Me cuesta horrores cerrar cada trabajo, y estos, hasta la fecha, se pueden contar con los dedos de una mano. Eso me hace admirar más todavía a mis compañeros de aventura. Ellos sí que tiene especialidad, duende y arte y todas esas cosas.
¡Autodidacta hasta la médula! Dicho así parece que se trata de una posición que quiero defender a toda costa. No es así. Me gusta aprender por mi cuenta, poder mejorar en aspectos que siempre me interesaron. Es como un regalo que te hace el tiempo libre. Aunque también me hubiese gustado acercarme al arte por vía académica, por supuesto.
Depende del día y estado de ánimo. En días como hoy, que ando tirando líneas para la ilustración del capítulo de David Gambero, me ha apetecido algo muy optimista. Siempre escucho música mientras trabajo y, por suerte para mi rendimiento, me concentro perfectamente con un gran abanico de géneros, grupos y solistas.
Pues me metí en ilustratura y en ello andamos. Lo cierto es que no entré en esto por ser una ilustradora sobresaliente, ni mucho menos. Alguien muy cercano a mí padece el síndrome de Marfan. Como sabréis, todos los beneficios que se obtengan por la venta de la novela, que estamos creando entre todos, serán donados a la Asociación SIMA - Síndrome Marfan. La fibra... que cuando te tocan la fibra olvidas la humildad y lo olvidas todo. Que me disculpen el resto de compañeros el atrevimiento, pero, no pude decir que no.
Fantástica tu actitud Alba. Te animo a que te autoproclames ilustradora, como hice yo en su día. Poquito a poco, pasito a pasito irás avanzando y cuando te des cuenta habrás recorrido un gran camino. No lo dejes porque ya lo haces muy bien, sin apenas experiencia. Besotes.
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